Una puesta en escena propia que trata de una de las tradiciones humanas más antiguas: el culto a los muertos.
En todo México festejamos el día de muertos, que es la celebración más popular y con más arraigo de todas las fiestas que hay en nuestro país.
Día de muertos nos brinda un panorama diacrónico de esta festividad mesoamericana que, a pesar de ser un fenómeno universal, adquirió un trasfondo único de todos los pueblos prehispánicos mesoamericanos y se siguió celebrado durante la época colonial, en la que adaptó elementos indígenas y europeos que se han seguido utilizando y sincretizando hasta hoy en día.
Resumen:
En la obra se abordará el fenómeno de la muerte y de su interpretación cosmogónica en Mesoamérica; lo que abarca la creación de los cielos, la mansión y dioses infernales, el viaje de los muertos; el árbol que mana leche para alimentar a los niños que han de volver a la vida; de la fiesta de os grandes muertos, la creación de la luna; la de la muerte de los cuatro soles o épocas anteriores a las del quinto sol en que vivimos y de las fábulas de Quetzalcóatl como el creador de los habitantes dentro del actual Ollintonatiuh o sol de movimiento.
Posteriormente la obra reflejará el momento, durante la conquista, en que empieza el sincretismo religioso e ideológico en México; cuando lo autóctono y lo europeo se mezclan hasta llegar a su auge durante los casi 300 años de la época colonial.
Al final de la obra se tendrá un atisbo de cómo actualmente se sigue celebrando esta fecha y de cómo, a pesar de tratarse de recordar a nuestros muertos, llenamos este día de recuerdos alegres, sabores y colores vivos con los que los mexicanos le sonreímos a la muerte, la saboreamos y hasta le cantamos.
Cuestiones técnicas
- Elenco: Fairyn Argandar, Libni Tayetzi, Tania Díaz
- Equipo Técnico: David de la Luz/ Miguel Gómez
- Tipo de público: Toda la familia
- Duración: 60 minutos
- Dirección: Fairyn Argandar
Requerimientos técnicos:
- Aparato de sonido, mp3 con auxiliar
- Luces básicas
- Proyector
- Caja negra o espacio al aire libre
- Si rebasa el aforo de 100 personas, o es al aire libre, se necesitan micrófonos de diadema y/o micrófonos inalámbricos
- Camerinos (no baños)
